La ilusión del plantel de Lanús y de toda la ciudad se hizo presente en la localidad vecina de Avellaneda, y a pesar de no haber poder conseguido un triunfo, el empate le alcanzó al Granate para seguir liderando el campeonato.
Racing arrancó mejor en los primeros minutos del partido y estuvo cerca de convertir tras una jugada individual de Rodrigo De Paul pero el intento de juvenil se fue a unos metros del palo derecho de Agustín Marchesín.
Pero eso pareció ser solo un espejismo ya que fue Lanús el gran dominador de las acciones de juego.
La más clara de todo el partido la tuvo Ismael Blanco, pero el delantero de Lanús falló en la definición en un mano a mano con Saja cuando podía haber resuelto de otras maneras.
Anteriormente, Víctor Ayala había avisado con un tiro libre a colocar que se fue cerca del ángulo derecho de Saja (tan cerca que la parcialidad de Lanús, en gran número por cierto, gritó “gol”).
El segundo tiempo siguió de la misma manera.
Lanús dominó basando su juego en Guido Pizarro y Cristian Chávez (de lo mejorcito del encuentro), pero ni Mario Regueiro ni Silvio Romero tuvieron la profundidad suficiente para ser el factor sorpresa que pueda llegar a abrir el marcador.
De esta manera, el equipo dirigido técnicamente por Guillermo Barros Schelotto no pudo conseguir su cuarta victoria consecutiva pero rescató algunos aspectos valiosos.
El más notable es el record que Agustín Marchesín lleva sin que le marquen goles (el último que le convirtieron fue el de Rodrigo Mora en el River - Lanús de la fechan 18 del Torneo Inicial 2012) y que ahora lidera el campeonato en soledad debido a la caída de River por 2-0 ante San Lorenzo.
MIRÁ EL MANO A MANO DE ISMAEL BLANCO CON SAJA: